Realidades sociales. Política de Población, Control de Natalidad.

 Política de población, control de natalidad.                          “Para vivir mejor todos´´ fue un lema promocional del Consejo Nacional de Población. Una política de población esta formada por el conjunto de medidas, programas y planes aceptados por un gobierno para promover cambios en cantidad y en calidad para el bienestar de sus habitantes. Requiere apoyo político y la participación de una sociedad educada e informada, que tome conciencia del objetivo y del compromiso adquirido en torno a las políticas implementadas. En concreto, se impulsa la disminución del ritmo de crecimiento demográfico y se promueve una distribución de la población mexicana acorde en el desarrollo sustentable de las regiones que conforman el país. A finales de la década de los años setenta, se creó la Ley General de Población y se iniciaron campañas de educación sexual en las que se informaba a la población sobre los distintos métodos de control de natalidad.

Para los años setenta, los avances médicos pusieron en las farmacias las píldoras anticonceptivas, q se sumaron al método del ritmo como medidas de prevención de embarazos. La tasa de natalidad bajo 2.5 hacia 1990.Sin embargo, la presión demográfica sigue aumentando. Para el año 2000, sumamos más de 100 millones de mexicanos, lo que implica que en los próximos 20 años se incorporaran por lo menos 20 millones de jóvenes a las actividades productivas. El gobierno y la iniciativa privada deberán duplicar el número de puestos de trabajo para generar verdaderas oportunidades entre las futuras generaciones.                      Hacia 1990, la expectativa de vida de los mexicanos aumento a 70 años. Esta es una cifra optimista que refleja el aumento en la calidad de vida, pero no se debe olvidar que aun existe una gran cantidad de muertes por enfermedades evitables. Si el país ofreciera mejores niveles de bienestar, si se eliminaran, por ejemplo, las enfermedades infecciosas y parasitarias, y si la detección temprana del cáncer se volviera una constante que no se limitara por cuestiones de pobreza o marginación social, el éxito seria patente.

Desacuerdo con el Congreso General de Población, en 1995, la población de nuestro país era de 91.1 millones de habitantes. En 2005, después de una década, el incremento nos lleva hasta 105.8 millones; la tasa de crecimiento es de 1.06, y la esperanza de vida fue ubicada en 75 años. El aumento de población nos plantea que hay una mejor expectativa de vida gracias a mejores servicios de salud y a los avances científicos de las décadas recientes.

La política de población no ha sido siempre la misma. En la época del presidente Lázaro Cárdenas se hablaba de que una manera de hacer patria era teniendo hijos. Cuando el crecimiento demográfico fue tal que nos duplicáramos  en muy pocos años, entonces se empezaron a acuñar frases como “la familia pequeña vive mejor´´ y “vámonos haciendo menos´´. Ciertos sectores de la sociedad se han opuesto a las campañas gubernamentales de planificación familiar y a la promoción de una vida sexual sana y responsable. En ese contexto, es importante señalar, que, a principios del siglo XXI, los mexicanos todavía enfrentan muchos desafíos para poder vivir plenamente ese ámbito de la vida. La promoción de la educación sexual, así como del ejercicio libre, responsable y respetuoso de la sexualidad, y de otros aspectos relacionados, como la cultura de equidad de género, son elementos indispensables para evitar enfermedades y embarazos no deseados, sobre todo entre las mujeres jóvenes de escasos recursos.